Como colombiano, es imposible no fijarme en los números del empleo, sobre todo cuando hay señales de mejora.
Y esta vez, el dato del DANE me dio algo de respiro: la tasa de desempleo en marzo fue del 9,6 %, una caída de 1,7 puntos porcentuales frente al mismo mes del año pasado (cuando estaba en 11,3 %).
También mejoró la tasa de ocupación, que se ubicó en 58,5 %, un avance significativo comparado con el 56,7 % de marzo de 2024.
Estos no son solo números; hablan de más personas con trabajo y menos hogares enfrentando la incertidumbre del desempleo.
Aunque marzo cerró con 359.000 ocupados menos que en el mes anterior (por una tendencia de reducción que empezó en diciembre), hay sectores que están jalonando el empleo:
- Agricultura, ganadería, caza, silvicultura y pesca: +381.000 nuevos ocupados.
- Industrias manufactureras: +218.000 empleos.
Pero no todo son buenas noticias. Hay sectores que vienen perdiendo puestos, y uno de los más golpeados fue:
- Administración pública, defensa, educación y salud humana: -153.000 empleos.
En el acumulado de enero a marzo, la tasa nacional de desempleo fue del 10,5 % y la ocupación promedio llegó al 57,7 %. Es decir, estamos viendo una recuperación gradual, aunque aún falta camino por recorrer.
Un punto que me sigue preocupando —y que no podemos ignorar— es la brecha de género. Mientras el desempleo de los hombres en marzo fue del 7,4 %, el de las mujeres fue del 12,6 %. La diferencia: 5,2 puntos porcentuales.