Nos reportamos desde el nuevo hotspot de la renta inmobiliaria en Bogotá: no es Chapinero, no es Usaquén, y tampoco es el centro histórico. Es una zona en pleno auge, al noroccidente de la ciudad, cerca del Centro Comercial Metrópolis, donde están naciendo proyectos pensados para un nuevo tipo de inversionista: el que quiere vivir de Airbnb… sin vivir pegado al celular.
En la capital está creciendo un nuevo modelo de negocio: comprar un apartaestudio entre 23 y 30 m², moderno, bien ubicado y, en vez de arrendarlo por años, alquilarlo por noches a través de plataformas como Airbnb. ¿Y por qué esto está ganando tanta fuerza? Sencillo: porque la renta corta genera ingresos más altos y mayor flexibilidad.
¿Arriendo tradicional o Airbnb? El duelo que todos los inversionistas están mirando
Con el arriendo convencional (el de toda la vida), un apartamento de este tamaño puede dejar mensualmente entre $1.200.000 y $1.500.000 si está bien ubicado. Pero con Airbnb, ese mismo apartamento puede generar entre $90.000 y $180.000 diarios, lo que significa que puede super los $2.500.000 al mes, dependiendo del mobiliario, la decoración, la calificación y la zona. Con una ocupación del 70%, los ingresos pueden duplicar los del arriendo tradicional.
¿Y el trabajo que eso implica? Aquí entra la magia: existen administradores especializados en renta corta que se encargan de todo —desde publicar tu apartamento en plataformas, responder a los huéspedes, entregar llaves, hacer limpieza y mantenimiento—. Tú solo recibes el dinero. Así, el modelo se convierte en un ingreso semi-pasivo, ideal para quienes quieren invertir pero no tienen tiempo para lidiar con inquilinos.
Urban 75: el edificio diseñado para Airbnb (pero sin parecer hotel)
Justo en ese contexto, aparece Urban 75, un proyecto inmobiliario que entendió que el negocio no está solo en el ladrillo, sino en el diseño inteligente. A solo unas cuadras de Metrópolis, el proyecto ofrece apartaestudios compactos pero funcionales, con acabados modernos, espacios pensados para el estilo de vida nómada digital y zonas comunes que seducen a cualquier huésped: terraza BBQ, coworking, cafetería y un lobby elegante que no grita “hotel”, pero sí dice “bienvenidos”.
Lo mejor es que el edificio ya viene preparado para el modelo Airbnb: cuenta con diseño atractivo para publicaciones en redes, y la opción de conectarte con administradores aliados que pueden operar tu propiedad por ti.
Además, el valor de entrada es accesible frente a otras zonas más saturadas. Y con una buena decoración, una ficha llamativa y buenas reseñas, puedes recuperar tu inversión en menos tiempo del que imaginas.
📲 Si quieres conocer más, visita: www.urban75.co
📩 Agenda tu cita por WhatsApp: wa.me/573108482135





